jueves, 13 de mayo de 2010

espero que no me hayais echado de menos.

A los que, aún no se por qué, os obstinais en seguir pasando por estas páginas que hace tiempo no dicen nada, gracias. Hace unos días decidí dejar pasar más tiempo que nunca sin escribir ni pasar siquiera por el blog, ahora que estoy de guardia lo he abierto y veo que, a pesar de los días sin escribir, aun hay gente que a diario se asoma por aquí a ver si hay algo nuevo.
Casi a diario el blog de alguien muy cercano y querido se empeña en recordarme que somos  dueños de nuestros silencios y esclavos de nuestras palabras. Sin embargo, muchos de nosotros cada día o con cierta periodicidad, lanzamos al mundo nuestras ideas en estos papeles virtuales que exponemos a quien los quiera leer. ¿qué nos impulsa a hacerlo?. Hay quien lo usa como terapia o descarga, quien quiere que la gente sepa lo que piensa. Creo que hay tantos motivos como blogs. Yo empecé como una forma de ejercitar la escritura que se me estaba anquilosando de no practicarla. Por eso, a diario me ponía hasta que pergeñaba un texto con cierta coherencia y aquí lo colgaba a la vista de todos. En las conversaciones normalmente callo y escucho a los demás bastante más que lo que me hago oir, pero en el blog tenía un ritmo frenético. Y me pregunto si tiene sentido. Pienso que lanzamos ideas por pura vanidad, porque pensamos que somos originales y que podemos aportar algo a los demás. Presunción pura y dura. Puede que incluso no queramos reconocerlo pero es puro ego. Incluso sin que notemos realmente que es así. Es lo que tiene la vanidad, cuando entra en nuestra casa (y pocos tiene la puerta cerrada para tan halagante visita) nos engaña, nos adula y nos hace creer que lo que no es mas que presunción nos parezca originalidad y justicia. 
Aun así, y reconociendo que escribimos buscando el reconocimiento ajeno, es agradable comprobar que algunos continuais pasando por aqui por si este pesado ha escrito algo. La vanidad es un defecto pero no hay quien se libre de ella.              

2 comentarios:

Álvaro Sánchez dijo...

y el que esté libre de pecado, que tire la primera piedra!
Pues sí, Javier. Se ha notado tu ausencia por aquí. Y es que hijo, a fidelidad, nos has ganado a todos!

Un abrazo

Anónimo dijo...

Ay madre mía! tú con estas ausencias de más de 2 días?? cómo has aguantado? me tengo que poner al día de nuevo pero este mes y el que viene va a estar complicada la cosa... en fin. Vanidad??? En mi opinión, al final también se pasa, yo al principio estaba más pendiente de si entraban o no, pero ya escribo lo que me da la real gana y paso del tema... sé que tú me subes las visitas y con eso me basta jeje!