miércoles, 27 de enero de 2010

¿Quién puede matar a un niño?

¿Recordaís la película de terror que tenía el mismo título que esta entrada?. Hablaba de unos niños que , aquejados de una extraña enfermedad asesinaban a todos los adultos que se cruzaban en su camino, y  éstos  eran incapaces de hacer daño a los niños porque no estamos preparados para ver la maldad en ellos. Leed  esta noticia recogida en un periódico de la ciudad alemana de Passau a finales del siglo XIX .

 Passau, 25 de Mayo de 1895.

El pasado día 4, en los jardines de la Romerplatz, cercanos a Lutpoldbrucke, tuvo lugar un extraño suceso. Mientras jugaba con otros chicos de su edad, y ante la sorprendida mirada de su madre Klara Pölzl , el  niño A.H. de seis años de edad, fue atacado con un cuchillo de grandes dimensiones, por un joven, al parecer desequilibrado, llamado Aaron Reitzger. Por fortuna el niño pudo esquivar el primer ataque, y la rápida intervención del soldado Geert Heldmann que se encontraba con su prometida la señorita Erika Rhaus cuidando los  sobrinos de ésta, impidió que Reitzger pudiera atacar otra vez al pequeño.
El agresor lo hacía con tal furia y obstinación que el soldado tuvo que sacar su espada y herirlo para salvar la vida del muchacho. Incluso tras varias heridas aun trataba de alcanzar al pequeño. En su locura no paraba de gritar frases como: ¡ Dejadme, tengo que hacerlo!,¡ Por el bien del mundo, Dejadme!,¡Muchos morirán, hay que salvarlos, déjame matarlo!, ¡Ellos  me dicen que debo matarlo! ¡ Las Voces claman pidiendo justicia!.
A consecuencia de las heridas que le infligió el soldado, y aquejado de fiebres intensas, cuatro días después de los hechos, Reitzger fallecía en el  KehabKrakenhaus*. En esos días no dejaba de delirar, pedía perdón por no poder cumplir su misión, mientras lloraba implorando piedad por sus errores. Rogaba que le dejasen matar al chiquillo al que llamaba asesino. En ningún momento mostró ningún tipo de arrepentimiento por sus abominables actos.

* KehabKrakenhaus es un hospital de Passau (Nota del autor).

La noticia, podría pasar como un caso más en el que un loco ataca a un niño. Sin duda pediríamos la privación de libertad de semejante sujeto (si no hubiese muerto), dando gracias a Dios porque, por esta vez, el visionario no se hubiese salido con la suya. Lamentaríamos la existencia de estos perturbados y exigiríamos a la sociedad mecanismos para la detección precoz de este tipo de problemas. Al mismo tiempo sentiriámos compasión por el trauma que el suceso habría causado tanto a la madre como al pobre niño.
Convertiríamos al enfermo en villano, y al niño en la inocente criatura que todos somos a esa edad. Si, podría pasar como un caso más entre los muchos parecidos que se dan continuamente en nuestra sociedad.
Por cierto, el niño cuyas iniciales eran A.H., no era otro que Adolf Hitler.

4 comentarios:

Concha Rivero dijo...

¡Anda ya! Que curioso. Que cosa.
Ah,esta tarde recupere mi vaio, de nuevo estaba en la facultad-enfermería. Han tenido que extraerle el disco duro. Tenía 230 virus. Como veras, antes muerta que sencilla,jeje.
A ver si mañana, cuando me instale jose lo que me tiene que instalar, me funciona okey.
La historia, genial. Dá que pensar.

j.garq dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
j.garq dijo...

Si, Si fuera cierta sería la leche.¿A qué si?. pero, como dices da que pensar. Los grandes asesinos como Hitler, Idi Amín y otros elementos parecidos han sido niños, y mi idea surge de la reflexión de que a esa edad si alguien los hubiese matado le habría hecho un gran favor a la Humanidad, y, sin embargo la sociedad del momento lo hubiese tachado de monstruo. Es un simple ejercicio de imaginación pero la inención era dar que pensar, y parece que en tu caso, se ha conseguido. Un beso

Anónimo dijo...

¬¬ ya conoces mi opinión sobre esta entrada... eso sí, te ha quedao mu chula!!!